martes, 12 de julio de 2011

Las proezas sexuales de Muhammad

La tradición islámica cuenta que Muhammad (Maomé, Mohamed, etc) era un super hombre del sexo:

Narró Qatada

Anas bin Malik dijo, “El profeta acostumbraba a visitar a todas sus mujeres de una vez, durante el dia o la noche, ellas eran once en número”. Pregunté a Anas, “¿Y el Profeta tiene fuerza para eso?”

Anas respondió, “Nosotros acostumbrábamos a decir que al Profeta le fue dada la fuerza de treinta (hombres)”. Y Sa’id dijo en la autoridad de Qaetada que Anas había dicho a el sobre nueve esposas solo ( y no once). (Sahih al-Bukhari, Volumen 1, Volumen 5, Número 268)

Narró Anas bin Malik

El Profeta acostumbraba visitar todas sus mujeres en una noche y el tenia nueve espsas en la época . (Sahih al-Bukhari, Volumne 1, Volumen 5, Número 282. Ver tambiém hadiths paralelas em el Vol. 7, Libro 62, números 6 e 142)

¿Cuál es la credibilidad de estas tradiciones? Note que Muhammad no era un joven de veinte o veinticinco años en la época – y aun con esa edad habría sido bastante increíble- pero el ya estaba con 60 años aproximadamente cuando finalmente adquirió todas las nueve esposas. Mas allá de eso, esas tradiciones dicen que este no fue un evento excepcional y único, sino que alegan que Muhammad hacia eso regularmente.

Hay otro hadith que puede fornecer una explicación de cómo estas tradiciones deben ser entendidas:

Narró Aisha: Magia fue lanzada sobre el Apostol de Allah demodo que él acostumbraba a pensar haber tenido relaciones sexuales con sus esposas, mientras él, en realidad, no las había tenido. (Sahih al-Bukhari, Volumen 7, Volumen 71, Numero 660, ver também Número 661)

Talvés el hadith quería decir que Muhammad etaba imaginando tener sexo con sus esposas – mientras en realidad no lo hacia – o sea, ¿será que este ultimo hadith es un comentario que explica los otros? Observe nuevamente que esa tradición (¡que es oriunda de la esposa y compañera sexual preferida de Muhammad!) también enfatiza que eso sucedía no solo una vez, sino que regularmente.

Aunque Muhammad probablemente no haya tenido tanto sexo como el estaba imaginando tener, las tradiciones mencionadas aún fornecen una evidencia de que el sexo era algo de mucha importancia en su mente.

Implicaciones más amplias

Las consecuencias de esta observación son mucho mayores de que simplemente producir una imagen más clara de la vida sexual de Muhammad, Aparentemente, los hadiths llamados de auténticos y confiables ¡están relatando ilusiones y alucinaciones de Muhammad como si fuesen reales!

Si ese realmente es el caso sobre este asunto, inmediatamente se levanta la siguiente interrogante: ¿Cuántos hadiths más de la tradición islámica podrían potencialmente encuadrarse en esta categoría? Muchas de las enseñanzas del Islam, sea referente a la teología o a las instrucciones de prácticas de la vida, son basadas en estos hadiths. ¿Estarían los musulmanes construyendo su fe y sus vidas en algo que puede haber sido nada más que simples delirios y alucinaciones de Muhammad?.

Si se verifica que las ilusiones de Muhammad son narradas como hechos en las hadiths, eso también levanta dudas en relación al Alcorán. Y si algunas u otras todas las alegadas “visitas del ángel Gabriel” y las “revelaciones” recibidas por él fuesen creaciones de una mente inestable, y fuesen realmente una ilusión, en vez de un hecho?

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